Para quienes no han contratado de forma anticipada servicios funerarios, la muerte de una persona o familiar se acompaña de la necesidad de hacerlo prontamente. Sin embargo, el adquirir un servicio funerario no es tan sencillo, debido a la poca información disponible sobre la oferta y los precios. Esto es así por tratarse de un bien de consumo imprevisto y no periódico. Además, no es el único problema presente en este mercado, pues los oferentes no siempre cuentan con la autorización para operar en dicha actividad económica.

Por las implicaciones sanitarias y ambientales de estas actividades económicas, los agentes interesados en participar deben ser previamente autorizados y luego vigilados. Sin embargo, en la práctica ocurre que rivalizan dos tipos de oferentes. Por un lado, empresas que han internalizado los costos de la regulación, brindando atenciones funerarias en el marco de los requerimientos sanitarios. Mientras que, por el otro, oferentes informales operando sin permisos. Para el BID (2019)(1), al ser agentes de tamaño y cobertura geográfica menor, pasan inadvertidos frente a la regulación, además de operar en establecimientos, muchas veces, inadecuados.

De esta forma, las asimetrías de información concurren en un mercado cuya oferta de atenciones funerarias disponible en el mercado es sumamente amplia y diversa tanto en precios y variedad de paquetes, los cuales combinan distintas cantidades y calidades de servicios y bienes para una misma necesidad. Mientras que la demanda está influenciada por factores sanitarios, legales y culturales, que, en conjunto, le atribuyen características de un bien inelástico (2), sin mencionar la vulnerabilidad emocional de los demandantes, que deriva en una menor atención a los detalles de la compra.

Estas condiciones potencian sus efectos adversos en menoscabo del bienestar del consumidor, pues, al evitar la regulación, la competencia no logra ser efectiva. Debido a que la informalidad, valiéndose de las asimetrías de información, tiene la capacidad de introducir presiones competitivas en el mercado derivadas, exclusivamente, de la omisión regulatoria y no de su desempeño en el mercado, al ofrecer atenciones a precios más bajos.

En este escenario, el riesgo de una elección subóptima es mayor, dada la poca información disponible en el mercado (3). Si bien estas empresas informales ofrecen atenciones más económicas, en general se tratan de paquetes de servicios básicos (4) o de menor calidad. Por su parte, los consumidores no reparan en la necesidad de contar con los servicios no incluidos hasta que la atención está siendo servida, llevándolos a pagar un precio mayor al negociado y, en ocasiones, al ofrecido por empresas formales. Bajo esa lógica, la informalidad acarrea consecuencias negativas al mercado (5), tanto para lo consumidores como para los agentes económicos autorizados (6), pues reduce sus incentivos de expansión. Por consiguiente, para que la competencia sea efectiva y aminore los riesgos de una selección desventajosa, es primordial que los oferentes cuenten con las autorizaciones sanitarias y ambientales correspondientes. De este modo, aun cuando los servicios funerarios correspondan a una demanda forzosa y urgente, se propiciarían mejores escenarios para la toma de decisiones, producto de la rivalidad empresarial.

(1) BID (2019). “Competencia informal y productividad en América Latina y el Caribe”.

(2) La cantidad por contratar de servicios no responde a las variaciones en el precio, sino a su naturaleza de necesidad e inexistencia de servicios sustitutos.

(3) Selección adversa, en donde el vendedor sabe más que el comprador acerca de los atributos del bien que está a la venta. Mankiw, 2012 “Principios de economía”.

(4) Se excluyen servicios de preparación física del cadáver, el traslado de una zona a otra y, en algunos casos, el tipo de ataúd incluido no suele adecuarse a las características físicas del cadáver.

(5) K. Arias Marín, P. Carrillo Maldonado y J. Torres Olmedo, “Análisis del sector informal y discusiones sobre la regulación del trabajo en plataformas digitales en el Ecuador”, Documentos de Proyectos (LC/TS.2020/75), Santiago, Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), 2020.

(6) Perry, G., Maloney, W., Arias, O., Fajnzylber, P., Mason, A. y Saavedra-Chanduvi, J. (2007). Informality Exit and Exclusion. Washington, DC: Banco Mundial.